José Luis Gómez Mancilla
Estudiante
VII Semestre
Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales
josé.gomez11@est.uexternado.edu.co
(Ejercicio de escritura de una entrada de Blog).
Hoy en día, en un país democrático de derecho como Colombia,
ha buscado luchar por diferentes derechos civiles que se ven vulnerados
diariamente en diversas zonas del país y que no permiten una buena o al menos
aceptable condición de vida, un techo, alimento diario y educación. A pesar de
que claramente no todos esos derechos se cumplen a la perfección para todos los
habitantes, el gobierno ha intentado luchar por la mejoría y el cumplimiento de
estos. Aun así, tanto los habitantes como el mismo gobierno han olvidado
defender uno de los derechos más importantes, del que tal vez no depende su
vida pero si su libertad y personalidad y es el derecho a la libertad de
prensa, la libertad de expresión y la información.
No es una gran sorpresa que no muchas personas reclamen
por este derecho, pero esto es más porque desconocen que poseen este tipo de
derecho y no porque nunca hayan sido vulnerados y además el mismo estado en vez
de defender este derecho así como cualquier otro, son de los principales entes
que lo vulneran, por medio de la censura, la desinformación y el ataque a
aquellos que levantan su voz.
Es extraño que esto suceda pues se supone el estado debe
defender a todos los ciudadanos y toda su carta de derechos por igual pero en
Colombia esto no es así, la democracia del país no está dispuesta a defender
aquello que pueda afectarlos. Esto hizo que en el año 1996 naciera la FLIP, la
Fundación para la Libertad de Prensa, una organización no gubernamental que
defiende la libertad de expresión y promueve el derecho de quiénes viven en
Colombia a estar informados, una organización que nació y que se mantiene, al
contrario del estado, con la intención de luchar y defender la expresión de
todo aquello que intente vulnerarla, pero entonces ¿de qué debe defenderse
exactamente? ¿Cómo es que la democracia
colombiana vulnera la libertad de expresión?
Para nadie es secreto que en Colombia existe el conflicto armado, el
narcotráfico, los paramilitares, la corrupción, los miles de contratos ilegales
y la gran cantidad de
irregularidades entre los mismos integrantes del gobierno
y sus diferentes ramas judiciales pero a pesar de eso el estado siempre querrá
o mantener esos conflictos en secreto o por lo menos con una baja relevancia,
escondidas en medio de dos noticias de entretenimiento y de ahí nace la
censura, del rechazo del estado a que les recuerden o recalquen sus errores o
aun peor, que se los destapen. Esta censura es lo que ha llevado a una gran
cantidad de amenazas o incluso muertes de periodistas y comunicadores. Durante
los últimos tres años han sido amenazados en Colombia más de 500 periodistas de
los cuales muchos decidieron huir del país con tal de conservar su vida y los
40 días que ocupó el Paro Nacional terminaron con 66 periodistas agredidos por
entes oficiales como la Policia Nacional y el ESMAD, además de la gran cantidad
de redadas que se realizaron de forma ilegal en diferentes casas de redacción
independientes que fueran tachadas sin dudar de terroristas y enemigas del
estado por el hecho de promover el Paro Nacional y buscar divulgar injusticias
del Estado contra el país, generando así uno de los escenarios más violentos
para la prensa nacional, una cicatriz muy grande y difícil de curar para la
historia y la democracia del país.
Pedro Vaca, director ejecutivo de la FLIP, manifiesta con
seguridad que Colombia no posee una democracia apta para la libertad de
expresión sino una democracia que solo busca defender su propio poder. Vaca
(2017) afirma: De alguna manera, la censura es la golosina del poder, al poder
le encanta la censura, ya sea el poder político, militar o poder económico. Las
sociedades democráticas deben ser tolerantes a la crítica y es algo que en
Colombia todavía estamos lejos. (Entrevista ActualidadRT)
Y es esta defensa la que protege y promueve
organizaciones como la FLIP, que buscan diariamente luchar contra esta censura
que existe hace mucho pero que va mutando con el tiempo, escondiéndose detrás
de medios comprados y amenazas furtivas, pero de la misma forma la expresión y
la información va mutando y buscando cada vez más formas de difundirse aunque
sean callados, tachados o borrados. La libertad está en el seguir insistiendo.
BIBLIOGRAFÍA:
·
Fundación para la
Libertad de Prensa - Colombia. (s.f.). Recuperado 24 febrero, 2020, de https://www.flip.org.co/index.php/es/la-flip/hacemos
·
Leal, S. (2020b, 8
febrero). Informe anual 2019: Callar y fingir, la censura de siempre.
Recuperado de https://flip.org.co/index.php/es/publicaciones/informes-anuales/item/2463-informe-anual-2019-callar-y-fingir-la-censura-de-siempre
·
Vaca, P. (2018, 8
febrero). Cinco desafíos para la libertad de prensa en Colombia - Cerosetenta.
Recuperado de https://cerosetenta.uniandes.edu.co/cinco-desafios-para-la-libertad-de-prensa-en-colombia/
·
RT en Español. (2017,
20 junio). La libertad de expresión en Colombia, ¿un derecho de pocos?
Recuperado de https://actualidad.rt.com/programas/cartas-mesa/241797-libertad-expresion-colombia-amenazas-periodistas
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