Guadalupe Orjuela Ayala
Gobierno y Relaciones
Internacionales con énfasis en Estudios Políticos Internacionales
Mail: guadalupe.orjuela@est.uexternado.edu.co.
En marzo
del 2020 visité la Fundación Buena Semilla, ubicada en el Barrio Egipto, en la
localidad de La Candelaria. Visita en la cual se determinó que de los proyectos
activos de la Fundación, se priorizaron dos en los cuales trabajar durante este
voluntariado: ‘Tejiendo Corazones’, taller de hilado y tejido para mujeres
cabeza de familia en condición de vulnerabilidad, y ‘Tallando Vidas’, taller de
madera para hombres expandilleros y en proceso de reintegración social tras un
periodo privados de la libertad.
Realicé un borrador
alimentado por un trabajo de escritorio inicial y una sinergia de mi
percepción a raíz de la única visita realizada, en donde se determinó que el
proyecto se centrará en apoyar la generación de productividad para los
proyectos comunitarios Tejiendo Corazones y Tallando Vidas. El trabajo se
desarrolló mediante la Metodología del Marco Lógico adaptada a las necesidades
del proyecto en particular, pues fue necesaria la construcción de un marco
contextual y uno teórico para orientar el rumbo del trabajo y determinar las
líneas académicas a desarrollar.
Posteriormente se
desarrollaría un diagnóstico desde 5 ámbitos: el organizacional, de oferta, de
costos, de precio, de consumidor, canales de comercialización y de valor
agregado; el cual requería de trabajo de campo para realizar el levantamiento
de información como por ejemplo el precio de venta de la competencia. Sin
embargo, a raíz de la declaración del Covid-19 como una pandemia, y de las
medidas decretadas por el Gobierno Nacional que implicaban el aislamiento
obligatorio, me fue necesario reestructurar la metodología para consolidar una
propuesta robusta y aplicable, por ende, la totalidad del trabajo se desarrolló
mediante el teletrabajo. Esta nueva realidad me generó muchos retos pues la
ausencia de datos clave en internet, la particularidad e informalidad del
proyecto,y la incapacidad de siquiera visitar continuamente las instalaciones
de la Fundación para entender sus dinámicas y cultura, fueron obstáculos que
ralentizan el proceso y me obligaron a crear estrategias de diagnóstico
flexibles.
Posteriormente, se planteó
una propuesta dividida en un plan de acción determinado por 30 actividades,
atadas a 12 productos articulados por 5 objetivos específicos; así mismo, estas
acciones se encuentran acompañadas de un plan de implementación, y uno de
monitoreo y evaluación; independientemente de que el marco es sea el mismo para
ambos proyectos, se debe realizar un ajuste a la realidad de cada taller y una
articulación con el trabajo realizado hasta el momento por los artesanos.
Además de la coyuntura, este
proyecto era un reto por no ser de mi área de trabajo constante pues se enfoca
en mayor medida en el área financiera, no obstante, los conocimientos que
adquirí durante mi carrera fue lo que me permitió construir un proyecto desde supuestos
posteriormente argumentados, materias como Metodología de Análisis de Política
Pública me brindó las herramientas para construir un proyecto sobre una base
sólida, dividido en ciclos que la transformaban en aplicada y aplicable. Así
mismo, las asignaturas relacionadas con finanzas y economía me brindaron un
esbozo del trabajo inicial, teniendo en cuenta que el objetivo general era
generar productividad en estos proyectos a través de la visibilización del
valor agregado, entendido como la narrativa construida desde la esencia del
Barrio Egipto y sus emprendimientos.
Este tipo de ejercicios son
uno de los espacios más valiosos que brinda la Universidad, pues es la
oportunidad de aplicar los conocimientos y habilidades adquiridos en el proceso
de formación, además de ser un espacio que permite visualizar el impacto de
proyectos sociales dirigidos a población en condición de vulnerabilidad, y así
aportar profesionalmente en la reducción de las brechas de pobreza y
desigualdad.