Algunos dicen que la gente se une sólo para protestar. Pero otros dicen que la calle es de todos y que, como es lugar público, es el espacio para todos. No obstante, otros consideran que, los vagos son los que salen a la calle. Lo cierto es que, cuando hay un asunto que reviste alguna importancia, la gente (sola o acompañada) se toma la calle. Unas veces son lugares que causan más impacto en términos de movilidad, otras veces más en términos de visibilidad. Hoy por hoy, la gente no solo se manifiesta en la calle, sino que se toman las redes y pronto -queramos o no queramos- nos llenamos de información sobre un asunto u otro (facebook, instagram, twitter, whatsapp, entre otras redes).
A pesar de ello, cuando se piensa sobre los intereses que mueven a la gente a organizarse, la tendencia es a creer que son cuestiones políticas o ideológicas. La realidad puede ser muy distinta, pero pocas líneas se escriben al respecto. Por lo menos en Colombia, donde hay cierta apatía por el quehacer de las organizaciones de la sociedad civil. Ello no pasa en otras latitudes. En Colombia hay mora.
Sea esta, entonces la ocasión, para pensar sobre las organizaciones de la sociedad civil colombiana, que si bien son del sector privado, tienen agencia en lo público. Se conforman de manera voluntaria y, la mayor de las veces, existen jurídicamente hablando; es decir, no solo tienen personería jurídica sino que pagan impuestos. Es el momento de considerar ¿qué es lo que saben hacer? ¿por qué, en ocasiones, se encuentra que son más reconocidas en el exterior que en el mismo país? ¿por qué -incluso- llegan a confundirse con entidades del Estado? ¿qué espacios se pueden considerar - en prospectiva- para sacar a Colombia adelante? Les invito a que pensemos en sus componentes y encontremos realidades y oportunidades en el marco de la situación actual, no solo de pandemia por el COVID-19 sino ante los compromisos internacionales para ser aceptados en la OCDE en 2030, ser parte del Pacto Global, haber firmado el Acuerdo de París, estar comprometidos con los Objetivos de desarrollo Sostenibles (ODS). ¿cuál es la oferta de valor de las OSC colombianas para que el país pueda jugársela asertivamente?
