Laura Juliana Ramírez Moreno
Séptimo Semestre
Finanzas y Relaciones Internacionales
Voluntaria en Asociación Nacional de Zonas de Reserva
Campesina
Fuera de mis estudios, no pensaba en que
podía integrarme a otras actividades y aprender mucho de ellas, pero un día decidí hacer algo diferente: aprender fuera del salón de clase y no solo sobre
números e idiomas.
Como experiencia decidí tomar parte del Programa de Voluntariado, oportunidad que ofrece la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales y me fui de voluntaria a la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina (ANZORC).
Allí tuve la oportunidad de aplicar mis conocimientos en finanzas, los que obtuve a lo largo de los semestres de formación profesional en la Universidad Externado de Colombia. Más que
eso, me relacioné con personas diferentes, vi una realidad diferente a la que
estaba acostumbrada a ver todos los días. Pasé buenos momentos, compartí ideas
y mi tiempo con personas increíbles.
Al
ser esta una asociación que busca apoyar a los campesinos que han perdido sus
tierras en el conflicto que tuvo el país en años pasados e incentivar las zonas
de reserva campesina, pude ver cómo -por medio de diferentes organizaciones
internacionales como la ONU, FAO, Forum SYD y profesionales en derecho,
ciencias políticas y lideres de las comunidades- se organizaban y financiaban
proyectos para defender estos territorios, capacitar a mujeres en zonas rurales
y hacer que los campesinos sacaran el mayor provecho de sus tierras.
La organización no solo buscaba realizar
estas actividades en el campo colombiano, aquí en Bogotá, se apoyaba la labor
de los campesinos por medio del café de la reserva. Este café- bar vendía productos como el café
producido por los agricultores para que más personas pudieran degustar su
calidad y conocer y apoyar la iniciativa de las zonas de reserva campesina.
Foto: Tomada en el Café de la Reserva y muestra los productos que allí se venden.
Además, el el Café de la Reserva se organizan diferentes eventos
charlas y foros para que también estudiantes de diferentes universidades tenga la oportunidad de participar y dialogar con los visitantes de los territorios, que en ocasiones son invitados al lugar, precisamente para conversar con los citadinos.
Fuera de mis conocimientos
en finanzas, también aprendí más de mi país y en parte de como la firma de la
paz ha llevado a que el actuar de la asociación sea cada vez más fuerte,
alimente mis conocimientos con las experiencias que me contaban los encargados
de realizar el trabajo de campo y su punto de vista sobre cada comunidad.
Realicé mi voluntariado durante un semestre y
fue una experiencia muy enriquecedora para mí, razón por la cual los invito a los estudiantes FIGRI a que se unan y apoyen iniciativas que nos construyan como sociedad, pues, además
de aportar un granito de arena, conocerán personas nuevas, verán otros puntos
de vista y aprenderán cosas que los harán crecer como personas.